El randonnée es un deporte de montaña relativamente nuevo en Chile, que permite caminar por valles y subir cerros, para luego descender con las técnicas del esquí. En la VII Región hay sólo una empresa que ofrece esta alternativa para recorrer los bellos parajes que rodean Laguna del Maule, ubicada a 2.200 metros sobre el nivel mar, los que en invierno suelen estar desiertos, debido al difícil acceso.

Hoy, el camino asfaltado hasta la misma laguna hace posible el desarrollo del turismo de invierno, precisamente la época más bella en la alta cordillera, cuando se pueden apreciar extensas cornisas de hielo y cortes de nieve de hasta 10 metros junto a la laguna casi congelada.
Convencido de que es posible potenciar el turismo aventura en ese lugar, Raúl Torres Jara (59), dueño de la empresa Viento Puelche Expediciones, decidió ofrecer a sus turistas circuitos de randonnée en los alrededores de la laguna. El año pasado, entre mayo y octubre, subieron 60 turistas y este año espera llevar a unos 200, gracias a los avances del camino internacional Paso Pehuenche.
Jara llegó cuando tenía apenas tres años al sector precordillerano de Cipreses, donde se encuentra una central de Endesa en la que trabajaba su padre. Parte de su infancia la vivió allí, junto a la montaña, aunque estudió en el Colegio Alemán de Los Angeles y el Blanco Encalada de Talca. Más tarde, volvió a trabajar en Cipreses. Pese a que su trabajo era como contratista en obras civiles, cada vez que llegaban los ejecutivos de Endesa o visitas a la planta, era él quien se encargaba de llevarlos a conocer el sector y confiesa que "fue entonces cuando decidí dejar de trabajar en lo que había estudiado para dedicarme 100% al turismo aventura".
Comenzó en 1995 con cabalgatas, trekking y pesca deportiva en la Laguna del Maule y luego trabajó en Hornopirén. Tras ello, volvió a ofrecer pesca deportiva en la Laguna del Maule, "pero la primera quincena de mayo termina la temporada y todos bajan. Los que amamos la montaña siempre quedábamos con deseos de quedarnos allá", relata el empresario turístico, que tiene un refugio en el sector. Cuando su hijo ingresó a la Brigada de Rescate Andino del Maule, se unió a él y aprendió el randonnée. "Pensé que sería una buena idea ofrecer este deporte de montaña a mis clientes de pesca deportiva". Y lo logró.
Tres horas a pie
Después de unas tres horas de viaje desde Talca, la expedición llega a la cuesta Los Cóndores, entre 1.800 y 2.000 metros, donde se comienza a caminar sobre la nieve. Se requiere de un esquí forrado con piel de foca sintética, que evita el deslizamiento, y con fijación articulada. La caminata hasta la laguna es de 10 kilómetros, durante tres horas.
(((ARTICULO EXTRAÍDO DE LA TERCERA))
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